Hoy un cortito análisis de lo sucedido con la recién destituida Vice-ministra de Juventud de Costa Rica, Karina Bolaños. De que hizo mal, de acuerdo. Que la destituyeron por el escándalo, de acuerdo. Que hayan pasado el video una y mil veces en los noticieros, en total desacuerdo. Suficiente con el morbo del asunto y el hacer leña del árbol caído. La lección que nos queda, una y otra vez, es que es un error, jamás, nunca, por ningún motivo, bajo ninguna circunstancia, debemos filmarnos, fotografiarnos o grabarnos en situaciones comprometedoras. Con la revolución en las comunicaciones que vivimos con los medios digitales hoy, todo, tarde o temprano, sale a la luz. Sino pregúntenle a Weiner en Estados Unidos que vio morir su carrera política por fotos indecorosas enviadas por twitter. No estamos solos. El mundo nos mira.